No había tenido la posibilidad de visitar Wenger Haus, por tiempo, por distancia, por distintas razones, pero hoy (gracias a mi mamá, mención especial para ella) lo logré y creo que agradezco la distancia de mis barrios, porque viviría feliz comiendo todos los días ahí aunque terminara rodando.
El lugar cuenta con la pastelería, donde existen muchísisisimas opciones para llevar sin azúcar, y una cafetería de junto donde, si no eres capaz de esperar, puedes degustar ahí mismo lo que desees con un café y ya que me dan estas dos opciones, lógico hice las dos.
En la cafetería tuve el placer de pedir un cheesecake de maracuyá y mi mamá pidió una torta de chocolate que amablemente compartió conmigo para contarles a ustedes cómo era. Partimos con el punto bueno que el lugar es muy bonito, la atención un 7 y las porciones son realmente generosas.
En la vida tengo dos debilidades máximas que son el queso y la maracuyá, por lo que este pastel me llegó directo al corazoncito, el cheesecake de maracuyá es cremoso ideal, la acidez de la maracuyá está perfectamente neutralizada, la masa es delgada y húmeda, cero migas, no se desarma para nada, además todo está cubierto por una salsa de maracuyá que sí tiene esa acidez pero en justa medida como acompañante, ñam ñam. La torta de chocolate es perfecta para cumpleaños, es de esas tortas que te dan la sensación que a todo el mundo les puede gustar, en especial a los chocolatelovers porque está cubierta, rellena y adornada de chocolate, es una full total torta de chocolate, linda y rica.
Para llevar pedimos mendocinos, alfajores, y un kuchen mix de 3 sabores, especial para probar distintos tipos de un solo viaje. Empiezo por los alfajores, el típico chileno (no sé si será originalmente chileno, pero sí típico) lo único no típico es que no tenía la técnica ahorrativa de poner manjar por afuera solamente, estaba repleeeeto de manjar, tanto manjar que en una mordida explotaba por los lados y honestamente, nunca hay demasiado manjar en la vida <3
Los mendocinos, alfajores estilo argentino, son los alfajores más grandes que he visto, bañados por un chocolate que se siente de alto porcentaje de cacao por lo que el manjar complementa en términos dulces.
El kuchen era ricota arándano, pera y el clásico de manzana, podría describírselos uno por uno pero al final la conclusión sería la misma ¡Son realmente exquisitos!
Hasta ahora, por lejos ha sido mi pastelería favorita de la vida sin azúcar, espero que algún día se expandan con más sucursales, porque todos deberían tener el placer de probarla. Hay tantas opciones sin azúcar como con azúcar, es hermosa la igualdad de condición en la que me vi al elegir lo que compraría, no verme reducida a dos o tres sabores de algo.
Les recomiendo por lo menos ir una vez, si pueden más mejor, pero prueben sus productos que son lo más rico que hay.
Creo que ya sé dónde pedir mi próxima torta de cumpleaños.
Aquí les dejo su página web, pueden encargar lo que quieran e ir a retirarlo al local <3
http://wengerhaus.cl/sucralosa/ pasen y vitrineen todas las opciones, personalmente les digo ¡Cómanse un mendocino si o si!
Tomás Moro 1749, Las Condes. +56 2 28130796
¡Vayan y disfruten!
